6.-

Hito Oriental de Perdiguero (3.170 metros)

Perdiguero (3.222 metros)

Hito Occidental de Perdiguero (3.176 metros)

 

Voy a cenar a Benasque y pernocto dentro del coche justo al inicio del camino que recorre el valle de Literola, a una altura de unos 1.590 metros. De buena mañana, comienzo a subir por el verde valle de Literola. Primero cruzo el bosque inicial, progresando por el camino que serpentea entre el mismo con una buena pendiente. Llego al Llano del Llosero, sigo en dirección a la cabaña del Forcallo, dejo a mi izquierda la misma y me encaramo por la ladera que se dirige a la Poza de Literola. Al ir solo y no hacer ruido sorprendo multitud de marmotas que, algunas tranquilamente y otras con más celeridad, cuando me tienen casi encima corren a esconderse a sus madrigueras. Como el camino es muy cómodo, avanzo muy rápido y en poco más de una hora y media alcanzo la Poza de Literola, a 2.250 metros de alto, justo después de dejar atrás la vistosa cascada que se desprende de la misma. Más tarde, inicio la subida por un inclinado corredor que me ha de conducir a una garganta rocosa que, después de cruzarla, me lleva a alcanzar el Ibón Inferior de Literola, situado a unos 2.470 metros. Ahora tengo dos posibilidades. La primera es dirigirme en dirección al Ibón Superior de Literola y, desde las cercanías del mismo, girar hacia la izquierda comenzando a subir hasta encontrar la cresta que se eleva hacia el Hito Oriental de Perdiguero. La segunda, que es la que yo voy a utilizar, consiste en ir directamente desde el Ibón Inferior de Literola hacia el collado Ubago, por un bien marcado sendero, con bastantes hitos y alternando hierba y roca, que va elevándose poco a poco, siempre cercano a la pared oriental del pico denominado Perdigueret, de 2.840 metros de altura.

 

 

Sigo, pues, esta segunda variante. Una vez llego al collado Ubago, las vistas hacia el valle de Estós son amplias y agradables. Observo el recorrido que se tiene que hacer para subir al Perdiguero o bien desde el refugio de Estós, o desde la Cabaña de Turmo o la Cabaña de la Coma. Después sigo resiguiendo los hitos que, siempre cerca de la cresta, me van dirigiendo hacia un punto prominente en un espolón que sube desde el Ibón Superior de Literola. A partir de este espolón, acercándome cada vez más a la cresta, el desnivel aumenta y ya, siempre entre pedrerío, voy subiendo por la vertiente oriental del macizo de Perdiguero. A partir de aquí sigo de nuevo hitos que, sobre una profusión de rocas, me van acercando, en muchos tramos ya sobre la misma cresta, hacia una antecima que precede a la cumbre del Hito Oriental de Perdiguero. Después de esta antecima la pendiente disminuye y voy acercándome poco a poco hacia la cima a la que me dirijo. Ahora, en poco más de diez minutos, alcanzo la cima del Hito Oriental de Perdiguero (3.170 mts.). Desde aquí, vislumbro la cumbre principal al final del filo de la ancha cresta. Sigo dicha cresta, siempre sobre montones de piedras, hasta que alcanzo después de unos 15 minutos la cumbre del Perdiguero (3.222 mts.). Las vistas desde esta atalaya son magníficas. Se aprecian perfectamente una serie de cimas conocidas. El Posets, los Seil dera Baquo, el Jean Arlaud, el Gourgs Blancs, el Gourdon, el Spijeoles, el Lézat, los Crabioules, la Tuse de Remuñe, el Maupàs… Hacia el noreste una nueva cresta desciende en dirección al collado Superior de Literola. Después de este collado, el pico Royo, la Tuca y Punta de Literola, etc. Hacia el sur, majestuosa, la Cresta Gargallosa, por la cual, aunque con algo más de dificultad, se puede ascender al Perdiguero desde el valle de Estós.

 

Subiendo hacia el Perdiguero, vistas hacia el Ibón Superior de Literola

 

Ahora, me dirijo hacia el Hito Occidental de Perdiguero. La progresión es sencilla, siempre evidentemente saltando sobre las piedras. Es sencillamente la misma arista por la que hace ya rato que camino que sigue en dirección oeste. Salvo una pequeña depresión y vuelvo a subir, llegando en poco rato al llano resalte cimero del pico, al final del cual está la cumbre, marcada por un gran mojón de piedras. Llego, pues, al Hito Occidental de Perdiguero (3.176 mts.). Unas 3,30 horas de subida. Bajo mis pies, mirando hacia el norte, el lago del Portillón, inmenso y azul, y cerca de su presa el refugio Jean Arlaud.

Llega, después, el momento de regresar. Deshago el camino en dirección al Perdiguero, pero ahora intento no tener que volver a subir al mismo y me voy deslizando por su ladera sur sin perder ni ganar altura hasta la parte más baja del cresterío que va desde el mismo hasta el Hito Oriental. Ahora, ya en la cresta, sigo hacia dicho Hito Oriental de Perdiguero, ya que es el camino más fácil y natural para regresar al Ibón Inferior de Literola. Comienzo a bajar en dirección a dicho ibón, descendiendo de nuevo la pedregosa ladera este del macizo, con bastante desnivel, hasta llegar al punto donde la pendiente decrece y comienzo a girar hacia la derecha, siguiendo el marcado camino que me ha de conducir al collado Ubago.

 

Ladera de acceso a la cresta del Perdiguero

 

Desde aquí, de nuevo con más pendiente y teniendo siempre frente a mí, aunque aún bastante abajo, el Ibón Inferior de Literola, voy bajando entre hierba y rocas, hasta llegar a las inmediaciones del mencionado lago. Sin detenerme demasiado, atravieso la pequeña garganta que aparece después del lago y alcanzo ya la verde y amplia parte baja del valle de Literola. El resto del camino es de fácil andar y de inclinación no muy pronunciada. Prosigo valle abajo, atravieso la Poza de Literola y voy acercándome hacia la cabaña del Forcallo. Pasando algo por encima de la misma, sigo el camino en dirección al lugar de la carretera donde está el aparcamiento del valle. Llego al Llano del Llosero y, enseguida, al pequeño tramo de bosque inicial por el que desciendo rápidamente hasta llegar al coche, tras poco menos de 3 horas de bajada. Comienzo, después, el regreso en dirección a casa.

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