13.- Noufonts (2.861 metros) Noucreus (2.799 metros) Pic de la Fossa del Gegant (2.808 metros) Cim A / 14.1 Pirineos orientales

13.-

Noufonts (2.861 metros)

Noucreus (2.799 metros)

Pic de la Fossa del Gegant (2.808 metros)

Cim Alt de les Arques (2.791 metros)

Cim Baix de les Arques (2.782 metros)

Pic de Rocs Blancs (2.785 metros)

Salgo hacia Queralbs y aquí aparco el coche y me dirijo, después, hacia la estación del cremallera que sube hasta el Santuario de Núria. Ya en la zona del santuario, sobre los 1.950 metros de altura, comienzo el ascenso por el camino que sube por la parte baja del valle que, posteriormente y tras cruzar el torrente por un viejo puente de madera, se bifurca en dos direcciones, el barranco de Noufonts y el barranco de Noucreus. Yo giro hacia la izquierda, hacia el Noufonts, y comienzo a remontar por muy buen camino una verde loma, con bastante pendiente, hasta llegar a la Coma de Noufonts, donde el sendero pierde inclinación. Al fondo de la misma un numeroso grupo de caballos, mezclados con ganado vacuno, pastorea cerca del manantial que inicia el torrente y que da el nombre a toda la zona, ya que el agua brota de distintas partes, formando como una especie de grupo de fuentes (9 fuentes). Sigo mi camino, ahora ya con el collado de Noufonts frente a mí y con una fuerte subida por delante. Poco a poco voy subiendo hasta que, al final, alcanzo el collado. Sin pararme demasiado giro hacia la izquierda en dirección al Noufonts, que se yergue algo más de 200 metros por encima de mí. La subida, aunque dura, es muy fácil y en no demasiado tiempo alcanzo la cima del Noufonts (2.861 mts.).

Enseguida tomo el camino de regreso, en dirección de nuevo al collado. Una vez en el mismo inicio la subida por el costado contrario en dirección al Noucreus. Al rato encuentro una vieja cabaña de piedras, que puede servir para resguardarse en algún caso extremo de fuerte necesidad. Después, sigo subiendo, por tramos muy pedregosos, hasta alcanzar el Noucreus (2.799 mts.).

Prosigo mi camino hasta llegar al cercano collado de Noucreus, a unos 2.790 metros de alto, adornado por un numeroso grupo de cruces, más de nueve, todas de formas distintas, y en el que siempre suele haber bastante gente. Después continuo hasta la cercana cumbre del Pic de la Fossa del Gegant (2.808 mts.). Camino un poco más hasta llegar a una especie de cima gemela, donde hay plantada la escultura de un gran piolet, supongo que en memoria de algún montañero fallecido.

El regreso hasta el collado de Noucreus es un pequeño paseo y, enseguida, estoy de vuelta en este sitio tan especial. A partir de aquí se puede iniciar la vuelta al Santuario de Núria resiguiendo el torrente de Noucreus, que es lo que hace la mayoría de la gente. Yo opto por seguir hacia el sur, recorriendo el denominado Serrat del Mig donde hay algún que otro pico secundario más. La cresta del Serrat del Mig es ancha y facilona, aunque bastante larga. No existen muchos desniveles por lo que en poco rato me planto en la cima del llamado Cim Alt de les Arques (2.791 mts.). Un gran mojón de piedras lo corona.

Cima del Pic Alt de les Arques

Prosigo hacia adelante y, en poco rato más, llego a la cima del Cim Baix de les Arques (2.782 mts.). De nuevo otro mojón de piedras en su cumbre. Son dos cimas muy cercanas y parecidas, razón por la cual comparten nombre.

De nuevo sigo de frente y, después de descender un poco, reinicio la subida hasta alcanzar la cima del Pic de Rocs Blancs (2.785 mts.). Hasta aquí unas 2,45 horas de recorrido. Tengo, ahora, frente a mí el Puig de Font Negra, al que ya no voy a ir.

Cima del Pic de Rocs Blancs. Enfrente, las dos cimas de Torreneules

Ya de regreso, flanqueo el mismo por su costado derecho, yendo en busca del Serrat de la Coma del Clot. Ahora, viendo que a pesar de la inclinación la bajada no es muy complicada, dejo el sendero del Serrat de la Coma del Clot y desciendo directamente sin seguir huella ni camino alguno, hacia el torrente de Noucreus que veo bajo mí, con un incesante trasiego de gente que sube al collado de Noucreus o baja del mismo. Después de un brusco y largo descenso, casi a tumba abierta, me planto al lado mismo del torrente, que baja aún bastante caudaloso. Lo cruzo por un sitio por el que encuentro el vadeo fácil y, después de subir un poco hacia el otro lado del valle, llego al ancho camino que proviene del mencionado collado de Noucreus, sumergiéndome entre la muchedumbre. Ahora ya solo me queda descender un rato más, siguiendo el ancho camino hacia el santuario, cruzando el vetusto puente de madera que ya atravesé por la mañana y acercándome en poco rato a la estación del cremallera. Llego a la misma en unas 1,45 horas de bajada. Con el cremallera bajo hasta Queralbs, cojo el coche e inicio el regreso a casa.