Tras pasar una agradable noche a los piés de las montañas, de buena mañana, me preparo para iniciar la ascensión. Comienzo la subida atravesando todo el muro de contención del lago. Al otro lado el camino se bifurca. Girando hacia la izquierda un sendero se dirige hacia el embalse de Camp de Long, por el denominado Pas du Chat. Girando hacia la derecha, que es lo que yo hago, el camino asciende hacia la brecha de Barris. Comienzo a subir girando primero hacia la derecha y, después, hacia la izquierda, remontando una pendiente de hierba y piedras, que me conduce hasta la cresta que baja directamente del Ramoung. La cruzo por la brecha de Barris, sobre los 2.440 metros de altura. Desde esta brecha tengo necesariamente que descender un poco, comenzando el recorrido que sube hacia la brecha de Chaussenque. Lo hago por entre enormes rocas. Afortunadamente, algunos hitos van marcando el camino más directo. Posteriormente, empiezo a remontar una pendiente de hierba, piedras y neveros. Cruzo varios torrentes que, desde las cimas, bajan hacia el Lac d,Aubert.

Cima del Néouvielle

Al cabo de un cierto tiempo alcanzo la parte más baja del contrafuerte noreste que baja del Néouvielle, situado a unos 2.700 metros de alto. A partir de este punto cabe la opción de ascender directamente al pico subiendo en paralelo a la cresta que baja desde la cima del Ramoung hacia la brecha de Barris. Pero yo decido seguir de frente por el itinerario más normal, pues quiero ir a lo más seguro. Dejando aquí el camino que desciende hacia la brecha de Chaussenque yo sigo, entonces, de frente, en dirección hacia el glaciar de Néouvielle. Paso por debajo de la brecha de Chaussenque, que permite enlazar con la cuenca de los Lacs Verts, y giro hacia la izquierda, subiendo por entre pedregales y tramos de nieve. En algún momento tengo que ponerme los crampones. Girando aún más a la izquierda, voy en busca del contrafuerte que baja del Néouvielle, al que accedo mediante una corta y fácil chimenea.

Trois Conseillers, Pic Long y Campbiel desde la cima del Néouvielle

Una vez en el lomo de este contrafuerte, observo cercano el glaciar de Ramoung. Rodeo el Néouvielle por una cornisa prácticamente horizontal y llego a la ladera sureste del mismo. Aquí me espera un fuerte desnivel. Voy subiendo en medio de grandes bloques, pero sin mucha dificultad. Después de un rato de dura, aunque corta, ascensión llego a una parte más llana. Estoy ya cerca de la cima. Ahora, en poco rato, alcanzo la cumbre del Néouvielle (3.091 mts.), tras unas 3 horas de subida, con magníficas vistas, sobretodo hacia el Pic Long.

Al cabo de un rato comienzo a bajar por el costado contrario. Voy resiguiendo la cresta que se dirige al collado existente entre la cima de la que vengo y el Ramoung. Es un descenso largo, bastante complicado y entretenido, en general todo el rato por el cresterío. Busco los puntos de paso que me parecen más sencillos. Y aunque pocos, hay algunos hitos que marcan el recorrido. Ya bastante abajo dejo la cresta y voy por su costado izquierdo, hasta alcanzar al cabo de un rato el collado, a partir del cual se inicia el ascenso directo al Ramoung. La subida, ahora, es algo más difícil, aunque más corta. Hay algún paso expuesto y delicado. Voy ascendiendo con mucho cuidado y sin tenerlo demasiado claro. Veo algunas equipaciones para rapelar, pero para subir es otra cosa. Además, no llevo ninguna cuerda que pueda ayudarme. Hacia la mitad de la subida encuentro una placa bastante lisa que no sé cómo afrontar. Además es bastante expuesta. Con mucho cuidado, asiéndome donde buenamente puedo, acabo llegando a su parte superior. Lo que me queda, ahora, es otro tramo de cresta, con grandes rocas y patio a ambos lados, por el cual poco a poco voy subiendo hasta llegar a las cercanías de la nueva cima. Tras sobrepasar un corto tramo más, también bastante complicado, acabo llegando, con gran satisfacción, a la cima del Ramoung (3.011 mts.), dominada por una colosal roca. Las vistas son de nuevo maravillosas, con el Néouvielle  relativamente cercano y muy elevado sobre mí. Desde la cima del Néouvielle he empleado unos 45 minutos y una buena dosis de adrenalina.

La complicada cresta de ascenso al Ramoung