Pero en lugar de dirigirme hacia la brecha Latour, giro hacia la izquierda en dirección a un vertical nevero, tras el cual observo la canal por la que creo que tengo que ascender. Para soslayar el nevero me dirijo hacia la izquierda para buscar su parte superior. Al acercarme a la muralla observo aún más hacia la izquierda un paso con roca y hierba que me parece que me ha de permitir subir al cresterío en dirección a la pequeña brecha que separa la Frondella Norte de la Aguja Cadier, llegando ya por encima de la canal anterior. Me dirijo hacia el mismo e intento subir por él. Pero enseguida veo que no es el mejor camino. La inclinación va aumentando y encuentro pasos complicados. Visto mi error decido descender de nuevo hacia el nevero. Ahora subo por encima del mismo por una serie de lajas inclinadas, pero con buenos agarres y muy adherentes, hasta entrar como puedo en la estrecha e inclinada canal que me ha de permitir acceder hasta la base de la Aguja Cadier.

La canal es bastante vertical y con piedras algo sueltas, pero no es excesivamente complicada. Después de trepar un rato por la misma alcanzo en su parte superior un nuevo y residual nevero que llega prácticamente al pequeño collado que separa la Frondella Norte de la Aguja Cadier. Sin llegar a dicho collado y teniendo a mi derecha la vertical pared de acceso a la Aguja Cadier, observo algunos hitos que me marcan la mejor dirección a seguir. Bastante vertical, pero no muy difícil, aunque ya tenga que ir tirando de brazos al principio, el itinerario se complica un poco al final, donde hay que ir con bastante cuidado pues las presas tienden a ir menguando en cantidad y calidad. Llego, al fin, a la minúscula cúspide de la Aguja Cadier (3.022 mts.), que tiene un pequeño promontorio rocoso justo al lado. Tiempo hasta la misma, unas 3 horas.

Después, comienzo de nuevo el descenso hacia la parte baja del nevero del collado. Sobrepasado dicho nevero por su parte más baja y reinicio el ascenso ahora en dirección a la Frondella Norte. Pero en lugar de bordearla por la izquierda, por camino fácil como había leído, y viendo algunos hitos que me llevan directamente a la cima, subo siguiendo los mismos. La subida se va complicando un poco, pero no llega a ser muy dificultosa, alcanzando después de unos 25 minutos más la cima de la Frondella Norte (3.062 mts.).

Frondella SW

Tras un descanso para reponer fuerzas, voy prosiguiendo por la de momento algo recortada arista, salvando una pequeña depresión, hasta llegar a la cima de la Frondella Central (3.071 mts.), alcanzando la misma en unos 15 minutos desde la Frondella Norte. Aquí, en el punto culminante de la cresta, encuentro el conocido piolet rojo que adorna la cumbre, junto a un pequeño buzón para quien desee escribir alguna cosa. Vistas extensas y fabulosas. Al oeste, los picos Palas y Arriel y, más lejano, el Midi d’Ossau. A mis pies, el embalse de Respomuso. Hacia el noreste, las crestas de Costerillou y del Diablo. Y, al este, el Cambales, la Peña Aragón, el Gran Facha, el pico de Llena Cantal, los marmóreos picos del Infierno y, algo más lejanos, el conjunto del Garmo Negro, Algas y Argualas. Vamos, un panorama inacabable de montañas. Pero debo de seguir mi camino. A partir de aquí el terreno se vuelve más practicable, más bonachón. Desciendo hasta una suave depresión y vuelvo a subir un poco llegando en otros 20 minutos a la cima de la Frondella Sur (3.055 mts.).

Después, bajo un corto tramo hasta un collado situado entre el pico ascendido y la zona sudoeste de la cresta. Desde el mismo desciendo por un corredor en diagonal hasta la base de la Frondella SW. Siguiendo algunos hitos llego a una estrecha canal. Para cruzarla he de bordear un resalte muy aéreo y algo complicado, asegurando mis pasos. Al otro lado, tras una pequeña repisa, entro en otra canal y, yendo hacia su izquierda, llego a la cresta. Girando de nuevo a la izquierda llego a la cima de la Frondella SW (3.001 mts.). Tiempo total de ascensión, algo más de 4,30 horas.

Torre de Costerillou y su cresterío

Desciendo por el mismo camino, vigilando mucho en la zona del resalte, hasta el punto al que había descendido antes. Busco después los hitos que me marquen el camino de descenso hacia las pedregosas laderas de los lagos de Arriel. Siguiendo los mismos, bajo un poco hasta un pequeño espolón en el que encuentro un escueto camino bajo los paredones del cresterío situado hacia el zona sur. Este sendero, algo colgado sobre el valle, me permite descender en dirección a los lagos, que tengo en todo momento frente a mí. Con la vista puesta en los mismos voy bajando, intentando seguir los escasos y confusos hitos que de vez en cuando me indican la correcta dirección. En algún momento pierdo un poco el camino, pero poco después lo vuelvo a recuperar. Bastante abajo ya, llega un momento en que me encuentro sobre un contrafuerte por el que no puedo bajar y debo de reorientarme. Después de pararme a observar un rato, decido ascender un poco hacia la izquierda para reencontrar el camino correcto, bajo los contrafuertes de la Arista Robach. Ahora sí, sin dejar los hitos, me voy acercando ya a los dos lagos más bajos de Arriel. Aquí el camino está cada vez más marcado.

Cima de la Frondella, con su característico piolet. Detrás, el Palas

En la orilla de los lagos, rodeados de altas cumbres, las vistas también son muy interesantes. Después, sigo el camino en dirección al embalse de La Sarra. Tras dejar a mi izquierda un camino que me retornaría al refugio de Respomuso, prosigo por la derecha siguiendo al principio el curso del barranco de Arriel. Posteriormente entro en una pedregosa ladera en la que el camino, después de una serie de lazadas, alcanza de nuevo la parte baja del barranco, después de una pequeña cascada. Ahora, cruzo el barranco y me adentro en una zona boscosa, que enseguida me lleva al entronque con el camino que baja del refugio de Respomuso. Ya solo me queda el agradable paseo de retorno hacia el embalse de La Sarra, donde tengo el coche. Tiempo de descenso total, casi 4 horas. Al cabo de un rato vuelvo de regreso a casa.