3.-

Posets o Tuca de Llardana (3.375 metros)

Tuqueta Roya (3.273 metros)

Tuca de Llardaneta (3.311 metros)

Las Espadas (3.332 metros)


Voy a pernoctar en el refugio Ángel Orús, a 2.095 metros de altura, por lo que dejo el coche en el aparcamiento de la Aigüeta de Eriste, a  unos 1.495 metros. Cojo el camino hacia el refugio al que que se llega en unas 2 horas. Comienzo, al día siguiente, la ascensión, flanqueando las Crestas del Forcau, primero por terreno cubierto de vegetación y más tarde en medio de pedregales. Al cabo de un cierto tiempo de ascensión entro en la Bal de Llardaneta. Vadeo el torrente del mismo nombre, sobre los 2.450 metros de altura. Sigo, después, el mismo por su derecha, y, dejando la ruta que me llevaría hacia los ibones de Llardaneta, remonto un fuerte desnivel hasta adentrarme decididamente en la Canal Fonda, a unos 2.580 metros de alto. Es habitual en la Canal Fonda encontrar algo de nieve, pero sin complicación alguna dependiendo de la época. Remonto esta canal hasta llegar a un caos de enormes bloques. Después, sigo subiendo la descompuesta pendiente en dirección a la brecha que constituye el collado del Diente, situado a 3.010 metros de alto, al que llego en poco rato. Desde aquí ya puedo observar, cercano, el impresionante Diente de Llardana. Tras superar hacia la derecha un pequeño promontorio, entro en la denominada Espalda del Posets. Esta loma, algo inestable, sube con un desnivel bastante constante hasta la cumbre del pico. Al principio la progresión resulta un poco complicada. Después, al encontrarse por el oeste con un nuevo tramo de cresta, sobre los 3.200 metros, el camino mejora ostensiblemente y, por un fácil sendero, llego hasta la cima del Posets (3.375 mts.), tras más de 3 horas de ascensión. Es ya la tercera vez que accedo a este pico, pues ya había subido al mismo desde los refugios de Viadós y Estós. Desde la cima, la cresta hacia las Espadas no parece ser muy complicada.

 

 

Comienzo después el descenso, por camino fácil, hacia la Tuqueta Roya. Llego a la depresión de la cresta que constituye la brecha de Llardana, a unos 3.225 metros,  y, en poco rato, tras una breve y sencilla ascensión, alcanzo la cima de la Tuqueta Roya (3.273 mts.). De nuevo un pequeño descenso hasta una nueva depresión en el cresterío, a 3.255 metros. La cresta, ahora, se empina un poco. Después, atravieso una cota secundaria y, en poco rato, llego a la cumbre de la Tuca de Llardaneta (3.311 mts.). Ahora, la cresta se complica aún más. La arista se vuelve más aguda y muy llana. Llego a un resalte que se puede evitar, no sin alguna dificultad, por la izquierda. Más tarde alcanzo un paso algo expuesto. Hay que bajar, con mucha precaución, un diedro bastante vertical y con pocos agarres. Llego a una parte muy aérea, llana y muy afilada de la arista. Se le acostumbra a llamar el paso del Funanbulista. A menos que sufras de vértigo, tampoco es para tanto.

 

Recorriendo el cresterío de Las Espadas

 

Al otro lado, de nuevo un pequeño muro por el que hay que trepar. Es algo empinado, pero tiene buenas presas. Al fin, se acaban las complicaciones y, ya en poco rato, siguiendo de nuevo la arista, ahora igual de recortada pero más fácil, alcanzo la cima del pico conocido como Las Espadas (3.332 mts.). Unos 45 minutos de recorrido por el cresterío.

 

El Diente de Llardana desde la cima del Posets

 

Prosigo, ya de vuelta, por la arista, aguda y compacta, en dirección sur, y atravieso una serie de cotas intermedias hasta llegar al cabo de un buen rato de descenso al collado de Pavots, a 3.095 metros. Desde este collado inicio un claro descenso hacia los ibones de Llardaneta que observo a mis pies. Dejo a un lado el ibón superior y llego a una confluencia de aguas, a unos 2.800 metros de altura. Después, sigo el torrente por la izquierda hasta llegar al Ibón Inferior de Llardaneta, a 2.650 metros. Dejo atrás los ibones de Llardaneta y reencuentro el camino que ya he utilizado para subir por la mañana, cerca de la parte más baja de la Canal Fonda. Ahora, cruzo de nuevo el torrente de Llardaneta y voy siguiéndolo por su izquierda en dirección a las Crestas del Forcau. Una vez en la base de las Crestas del Forcau, sigo el itinerario de descenso hasta el refugio Ángel Orús, al que llego tras unas 2,30 horas de bajada. Deshago el camino hasta el aparcamiento, cojo el coche y vuelvo de regreso.